ACERCA DE ALGUNOS GENTILICIOS

Ayer me preguntaba a mí mismo quién habrá sido el boludo que se le ocurrió ponerle "maragato" a los que nacen en Carmen de Patagones. A todos aquellos profanos que me leen les aclaro que sí, que contra toda previsión y contra toda lógica, el chabón que nace ahí no se llama patagón, ni carmenino, ni carmeneño patagonense, ni carmenés patagonero; se llama maragato. Fin de la digresión.
Así que retomando la historieta: ¿Quién fue el pelotudo? ¿Fueron los hermanos Francisco de Viedma, y Narváez? ¿Fue el Cardenal Cagliero? No va a faltar el mail de algún idiota explicándome, con el mismo tono de voz que se usa para hablarle a los niños con síndrome de down, que la maragatería queda en andalucía o vuelvelucía o la mar en coche. A tomar por culo con las etimologías, o gentilicios o como mierda se llame. Yo ya me sé eso. A las ciudades por lo general las funda un señor que vino de otro lado. Es lógico. Si una ciudad no existe, y hay que fundarla, el chabón que la funde tiene que venir de otro lado. Como Buenos Aires, que la fundaron los españoles y sin embargo nos llamamos porteños o bonaerenses, no gallegos. O los nacidos en el altiplano, que parece que vinieron del Asia por el estrecho de Bering, a los cuales llamamos bolitas, o bolivianos, pero jamás japoneses, si bien son bastante parecidos. Así que no tiene nada que ver que los fundadores hayan venido de donde sea, habría que haberles inventado un gentilicio nuevo. Ese Piedrabuena, en vez de irse por ahí a boludear con su barco, tendría que haberse sentado en un banquito y tomado algunos minutos para pensar seriamente cómo carajos se llamaría un nacido en Carmen de Patagones. Sé que es una tarea un tanto complicada, pero bueno, parece que los primeros colonos eran un cacho vagonetas y entonces dejaron todo como estaba. Se siguieron llamando ridícula y anacrónicamente "maragatos" hasta nuestros días inclusive. Yo siempre dije patagón, a mí me chupa un güebo. Y siempre tuve que soportar a más de un gil corrigiéndome. Además, si yo les dijera alegremente a mis amigos porteños: "Muchachos, me hice maragato!" me mirarían raro; pensarían que me hice puto o algo por el estilo. Es que suena a eso, suena a gay, a gordo comilón. También suena a comida caribeña, por ejemplo: "Oie chico, que rico cocina tu muher los maragatos con chile" O incluso parece una madre venezolana retando a su hijo haragán: "Ignacio Alfredo de las Mercedes, no sea usté maragato y aiude a su tía Eduviges a ievar los puercos al corral". Es por ello que este blog tendrá un espacio abierto para todos aquellos que quieran que nos cambiemos el gentilicio y envíen para eso un mail inventándole un nombre para los maragatos; un nombre como la gente, libre de confusiones al pedo. Luego se someterán a votación por parte del jurado compuesto por Jorge Curetti y Ricardo Bustos, y de ahí en más vamos a llamarnos de esa forma. La persona cuyo gentilicio salga elegido se hará acreedora a una careta de doña Cata Villarino, donada por maxikiosco "El Chano".

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Hemos recibido mails del Turco Abdala y de Pirincho Delányelo proponiendo "Carmenpatagonense" y "Carmenino Patagonés", respectivamente. Pero el ganador es sin duda el negro Asunsao, quien escribe: "Eu credo que o melhor e Carmeniño Patagoneiro. Obrigado". Así que Señor Asunsao, ya puede pasar a retirar la careta de la vieja Villarino.

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